El
alumbramiento de Anna se produjo durante la mañana de ayer en la Maternidad
Privada de la capital. Es hija del presidente de la Asociación Civil La Dulce
Espera, Raúl Hermosilla e impulsor de la Ley de Reproducción Médicamente
Asistida de nuestra provincia.
La ley provincial de
cobertura de fertilización asistida ya dio sus primeros frutos. En esta
oportunidad, una rosada, chiquita y arrugada, de 3,650 kilogramos, que maduró
durante treinta y ocho semanas. Se llama Anna y nació gracias a los tratamientos
de fertilidad que sus propios padres, (Balbina Ruiz y Raúl Hermosilla) quienes
impulsaron la aprobación de la ley que garantice la cobertura total e integral
de dichos tratamientos.
Anna Esmeralda nació en la mañana
del miércoles 15 de abril en la Maternidad Privada, por una operación cesárea
programada bajo la supervisión de la doctora Norma Vidales y el doctor Luis
Antonio García.
Su mamá, la médica de
familia Balbina Ruiz, y su papá, el psicólogo organizacional y periodista Raúl
Hermosilla, la habían buscado durante casi nueve años, pero la biología jugaba
en contra. Después de decenas de consultas a distintos ginecólogos supieron
cuáles eran las causas: al principio nadie podía explicarles por qué no podían
lograrlo.
“La situación no era
alentadora”, explicaron, “pero sabíamos que íbamos a lograrlo. Con la
aprobación de la Ley Nº 9440 se abrieron muchas puertas y pudimos acceder a
técnicas de mayor complejidad, sin las cuales, hubiese sido imposible concebir
a nuestra bebé”, resaltó el flamante papá.
Por el mes de julio, Balby –
como suelen llamarla- y Raúl viajaron a la provincia de Córdoba y quedaron en
manos de un equipo de profesionales encabezados por la doctora Natalia
Battello, perteneciente a la Clínica Nascentis, durante veinte días, por lo que
tuvieron que radicarse provisoriamente allí.
El tratamiento fue un éxito
y Balby quedó finalmente embarazada, y tras treinta y ocho semanas, durante las
cuales debió tener algunos cuidados específicos, pudo dar a luz a Anna.
Siempre soñaron con ponerle
ese nombre su hija, explicarían después, pero en realidad el nombre es una
reducción de Gianna, la médica santa italiana a la que se encomiendan las
personas que no pueden concebir.
Raúl, preside desde hace un
año la Asociación Civil La Dulce Espera La Rioja, organización que impulsó la ley en la
provincia y que ya cosechó varios frutos: entre ellos figuran las mellizas
Morena y Paula, Gianna y Cayetano, todos ellos concebidos a través de técnicas
complejas de fertilización.
“La felicidad ha llegado a
nuestro hogar y vamos a seguir trabajando para que muchas más personas puedan
gozar sin mayores preocupaciones de todas las posibilidades que la ley nos
brindó”, concluyó el papá de Anna.
La provincia de La Rioja fue
la primera en todo el país en adherir completamente a la ley nacional de
fertilidad. Lo hizo el 3 de octubre de 2013 en una sesión histórica y ya son
más de 40 las parejas y personas solas que han podido realizar consultas
médicas y otras tantas acceder a los tratamientos de alta complejidad en Córdoba.
En la actualidad, son doce las parejas que están cursando embarazos y se
esperan otros nacimientos durante este año.
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